Juan de Eulate - salvatierra-agurain

Juan Hypolito Joseph
Alvarez de Eulate y Santa Cruz
Inquisidor General y Obispo de Malaga

Kepa RUIZ DE EGUINO

A los veintiséis años ingresó en el  Colegio Mayor de Santa Cruz de Valladolid. Tres años después con veintinueve años ocupa el cargo de Visitador General del Obispo de Valladolid y en Febrero del mismo año, Provisor y Gobernador del Obispo de Osma en Soria.

A los treinta y dos años es Fiscal de la Inquisición General de Valencia y a los dos años asciende a Inquisidor del mismo Tribunal. A los treinta y cinco años toma la posesión del Tribunal de la Inquisición de Granada y  más tarde del de Madrid.

En el año 1738 y con 54 años es nombrado Inquisidor General de Corte y después de unos años ocupa la Fiscalía del Consejo de la Suprema, llegando a promocionar a miembro del Consejo Supremo de la Inquisición en 1.741. En el mismo año de 1738 aparece en el Archivo de Salvatierra un documento que dice:
“que con motivo de que Juan Ignacio Alvarez de Eulate y Santa Cruz, natural de ésta Villa de Salvatierra es promovido a Fiscal de la Suprema Inquisición, se festeja con corrida de toros y repique de campanas para darle la enhorabuena, además de Misa solemne con carro triunfal, Vítor y acompañamientos...”

A los sesenta y un años en Octubre de 1.745 fue nombrado Obispo de Málaga, recibiendo la consagración episcopal en Madrid el 27 de Mayo del año 1.745, e hizo su entrada en Málaga el 20 de Junio del mismo año.

Su intensa dedicación caritativa se puso al máximo con motivo de las terribles epidemias que padecieron las provincias andaluzas en los años 1.750 y 1.751 en las que sólo en la provincia de Málaga perecieron más de mil personas, Don Juan de Eulate estuvo socorriendo a pobres y apestados.

Sabemos que a su costa se creó un hospital para apestados en Málaga, en el Barrio de la Trinidad, para lo que vendió parte de sus bienes en Madrid y Salvatierra, y abriendo en el Convento de San Francisco un local de mantenimiento para los pobres.

También ayudó a la reparación de Iglesias y monasterios, especialmente la Iglesia parroquial de Santiago Apóstol, también de la capital a la que transformó de mudéjar a barroca.

Impulsó también las obras de la Catedral malagueña en 1.749. Y atendiendo un sugerencia del rey Alfonso VI empezó a levantar un Hospicio en las cercanías del Convento de los Trinitarios, en Junio de 1.751.

En Diciembre de 1.747 aprobó las constituciones del Beaterio de Alora, y en 1.749 publicó un edicto anunciando las gracias y privilegios del Jubileo anunciado para 1.750 por el Papa Benedicto XIV.

En 1.755 quebrantada su salud, por suscripción médica se retiró a la Villa episcopal de Coin y fue desde allí a tomar baños de agua a Carratraca, mejorando algo.

Durante su estancia en Coin mandó construir varias fuentes de las que tristemente hoy sólo quedan algunos preciosos ejemplos como:

Su cuerpo fue trasladado a Málaga y enterrado en la Catedral.

Como homenaje a toda su dedicación en favor de los malagueños, la ciudad de Málaga le dedicó una calle en la zona de las Flores.