Representación de la Pasión en Heredia - salvatierra-agurain

La Semana Santa alavesa tiene un lugar de referencia en esta localidad, con un acto religioso, la Representación de la Pasión de Cristo, en el que participa todo el pueblo.

La Semana Santa tiene en Álava un amplio abanico de celebraciones por todo su territorio, una parte de esa realidad es la celebración del vía crucis de Heredia, que desde hace unos años se viene celebrando el Viernes Santo en este pueblo perteneciente al Ayuntamiento de Barrundia, el vía crucis viviente popular, es el único de este tipo que se conserva en la Llanada Oriental y que llevaba treinta años sin celebrarse. Y ya van seis años desde su recuperación.

Heredia, a seis kilómetros de Agurain, en la carretera que une esta población con Gebara, fue paso de peregrinos en la ruta del Camino de Santiago alavés que venía desde Guipúzcoa por el túnel de San Adrián en dirección a Vitoria.  

La mayoría de los setenta y cinco habitantes de Heredia participan en esta representación. Salen de la iglesia de San Cristóbal a las 11 y media y recorren las calles subiendo hacia la ermita de San Bartolomé y al camposanto.

VIA CRUCIS VIVIENTE POPULAR DEL VIERNES SANTO EN HEREDIA

Se ha recuperado éste Vía Crucis popular del Viernes Santos después de que se dejara de representar en el año 1964.

Se trata de un espectáculo de honda religiosidad que va ganando popularidad y empieza a ser conocido en muchos de los lugares del entorno de la Llanada alavesa.

Son varias las hipótesis barajadas sobre el origen de ésta representación de la Pasión de Cristo, algunos dicen que fue traída a Heredia por un sacerdote de la zona, si embargo otros creen que éste Vía Crucis viviente tiene su origen en el mismo Heredia, tal es la opinión que recogimos de los hermanos Dorina y Pablo Murua que contaban en el año 2008 con 86 y 82 años respectivamente.

Ambos nacidos en Heredia e hijos de un sacristán y organista que ejerció su profesión en la Parroquia de San Cristóbal de Heredia durante sesenta años. En los recuerdos de la niñez de todas éstas personas está presente ésta procesión desde los años 30 del siglo pasado, con constancia que ya se celebraba ésta procesión antes de ésta fecha sin poder concretar desde cuando. Lo que si recordaban era que en aquellos años si bien existían los mismos personajes actuales, solamente la persona que representaba a Cristo vestía como tal con una túnica de color morado y una corona de espinas de la que pendía un lienzo que ocultaba su rostro.

Recordaban con claridad que en aquellos años la figura de Cristo era representada por un tal Ciriaco que recorría descalzo todo el trayecto y el resto de los personajes vestían ropas normales de calle.

El recorrido de la Pasión no ha sufrido ninguna variación saliendo desde la Parroquia de San Cristóbal donde se celebra el juicio y terminando en lo alto del pueblo en la ermita de San Bartolomé en la que se representaba la 14ª estación del Vía Crucis con el enterramiento de Cristo.

Recuerdos del Vía Crucis viviente

El Vía Crucis viviente de Heredia lo integran dos grupos de participantes, todos del pueblo. Por un lado actuarán Jesús, María, la Verónica, San Juan, el Cireneo, Pilatos, los fariseos y los soldados del ejército romano. Por otro, el coro parroquial, compuesto por veinte mujeres que acompañan al párroco y van leyendo escritos de varios escritores, como Pablo Neruda, Unamuno, Martín Descalzo, etc., además de acompañar a la procesión cantando. La organización corre a cargo de la Asociación Berein de conservación del patrimonio, juntamente con la parroquia.  

Muchos vecinos recordaban esta tradición, aunque no existe ningún documento gráfico ni escrito alguno con los diálogos.   

El camino está jalonado por catorce cruces de hormigón, que representan las estaciones de la Pasión, desde el juicio de Cristo, que se realiza en el pórtico de la iglesia, hasta su crucifixión en el alto de la ermita de San Bartolomé, monumento del siglo XVIII.   

Este vía crucis no es originario de Heredia. Lo trajo un sacerdote que vino de Ordoñana en los años 50 del pasado siglo. En Ordoñana se estaba perdiendo y el párroco no quería que esta tradición desapareciera, por lo que, cuando fue de párroco a Heredia, la pudo conservar con la ayuda de los vecinos. Según el actual párroco, Patxi Otamendi, verdadero impulsor del vía crucis, junto a la Asociación Berein, se tiene constancia, de que en Heredia era muy seguido por todos los habitantes y se realizaba la representación con más crudeza que en la actualidad.

Organizada por los miembros de la asociación Berein de conservación del patrimonio y por la parroquia se celebra cada año el Viernes Santo como en anteriores ediciones, el pueblo de Heredia donde el pueblo escenifica el Via Crucis y posterior muerte de Jesús en la cruz, tal y como nos cuenta  el Padre Patxi Otamendi, uno de los promotores del acto, quien también explica que "el intervalo de 40 años de ausencia de representación corresponde a la época posterior al Concilio Vaticano II, tras el que decayeron tradiciones de la religiosidad popular".

Similar cese de representación de la Pasión ocurrió en las localidades catalanas de Esparraguera y Olesa de Montserrat.

"Los vecinos conservaban la memoria histórica del acto y del guión, aunque no existe ningún documento gráfico. Por eso nos pareció conveniente su recuperación", señaló el Padre Otamendi. El camino estará jalonado por catorce cruces de hormigón, que representan cada una de las estaciones de la Pasión, desde la condenación hasta la crucifixión.

Gran retablo

El patrimonio artístico de Heredia se encuentra representado principalmente por su hermosa Iglesia de San Cristóbal, empezada a construir en el siglo XIII, con sus techos pintados y su retablo mayor del siglo XVI. Dentro de esta iglesia hay que destacar el magnífico retablo y también la bellísima capilla de San Diego. Además de la torre de los Heredia.  Durante las obras de saneamiento y pavimentación hechas hace una par de años en las calles del pueblo, aparecieron cerca de mil quinientas piezas de cerámica de la época romana. Ahora se están estudiando por los equipos correspondientes de la Diputación.


El apellido Heredia

• Aunque este apellido se suele asociar a los gitanos, por el protagonista de uno de los poemas más populares del Romancero de Lorca, pocos saben que existe un pueblo alavés de 75 habitantes, que los calés lo eligieron por ser el lugar en el que vivían o por el nombre del Señor al que servían.
  

 
Cuando Lorca escribió su poema Muerte de Antoñito el Camborio, puso a la familia protagonista el apellido a Antonio Torres Heredia, sin saber que se trataba de un apellido de origen alavés. Lo habitual es que cuando la gente lo escucha lo relaciona con los gitanos. Otros le cantaron a Antonio Vargas Heredia flor de la raza calé. No en vano, este apellido es común entre ellos. Tal cosa se debe a que por la época de los Reyes Católicos, los gitanos que habitaban en sus reinos fueron obligados a cambiar sus nombres naturales por otros "cristianos". Así fue que muchos, en Euskal Herria, tomaron los nombres de los lugares en los que vivían, muchas veces nuevos, de ahí Berrio, Etxeberria o Gabarri, o de los señores a los que servían. Y los Heredia eran señores muy importantes en Álava y en el Reino de Aragón.

Sin embargo, a los habitantes de la localidad de ese nombre, en la Llanada, municipio de Barrundia, no se les relaciona con los gitanos, sino con los judíos, pues ese es el mote que llevan sus naturales. Hay quienes aseguran que cuando los Reyes Católicos decretaron la expulsión de los judíos de sus reinos -allá por 1492- los señores de Heredia dieron cobijo a los habitantes de la pequeña aljama de Agurain - Salvatierra, situada entre la iglesia de San Juan y la muralla, en una calle que todavía hoy se llama Urdai gutxi (poco tocino), en alusión a las peculiaridades alimentarias de sus antiguos habitantes. Sea como fuere, lo de judíos es un sobrenombre que los de Heredia llevan hoy en día con orgullo.

Es un curioso nombre, pues ha conservado su grafía, pero no su sonido. En el euskara antiguo la letra h no era muda, sino que se aspiraba, como todavía se conserva en el euskara suletino. Sonaba algo así como Geredia, tal como se ha conservado en otras zonas del país. En el famoso documento del Ferro de Álava -también conocido como Reja de San Millán, datado en 1025- aparece Deredia como el tributo que los pueblos de la primitiva Álava daban al monasterio navarro-riojano de San Millán de la Cogolla, en forma de rejas de arado de hierro.

En el medievo, los Heredia fueron muy influyentes en Álava, Navarra y Aragón.

En los alrededores de Heredia hubo en el pasado varias aldeas hoy desaparecidas, cuyas parroquias subsistieron como ermitas durante algún tiempo. Estas fueron Udala, en un alto perteneciente a Agurain, Kirku, cuya iglesia de San Martín se arruinó en 1920, y Andosketa, cuya parroquia de Santiago, desapareció a principios del siglo XX. Heredia tiene 75 habitantes y sigue siendo un pueblo mayoritariamente agrícola.

La pequeña localidad de Heredia, perteneciente al Ayuntamiento de Barrundia, ultima los preparativos del Vía Crucis que celebrará por sexto año consecutivo, tras un parón de cuarenta primaveras, con los vecinos como actores principales. La cita será el Viernes Santo a partir de las 11.30 desde el pórtico de la iglesia de San Cristóbal al camposanto.   Durará poco más de una hora y contará con dos grupos de participantes. En el primero de ellos actuarán Jesús de Nazaret, el Cireneo, la Virgen, Verónica y los fariseos. En el otro, el coro parroquial.

BIBLIOGRAFIA
Fernando Sánchez Aranaz – Heredia donde se cruzan los caminos
Patxi Otamendi – Asociación Berein
Eva San Pedro- Procesión de Heredia
Henrike Knörr – El Vía Crucis de Heredia
Jaso Ruiz de Alegría – La pasión de Heredia

Kepa RUIZ DE EGUINO