Toros S. XIX - salvatierra-agurain

Buscar
Vaya al Contenido

Menu Principal:

Toros S. XIX

Fiestas y Tradiciones > Tauromaquia en Agurain

HISTORIA DE LA TAUROMAQUIA EN AGURAIN EN EL SIGLO XVIII

Por: Kepa RUIZ DE EGUINO


Año 1738

En Agurain las grandes celebraciones se festejaban con corridas de toros.  En el siglo XVIII, en el año 1738  Don Juan Alvarez de Eulate y Santa Cruz, hijo de Salvatierra a los 54 años es nombrado Inquisidor General de Corte y después de unos años ocupa la Fiscalía del Consejo de la Suprema, llegando a promocionar a miembro del Consejo Supremo de la Inquisición en 1741.

En el año de 1738 encontramos en el Archivo de Agurain un documento que dice:

 "...que con motivo de que Don Juan Ignacio Alvarez de Eulate y Santa Cruz, natural de ésta Villa de Salvatierra es promovido a Fiscal de la Suprema Inquisición, se festeja con corrida de toros y repique de campanas para darle la enhorabuena, además de Misa solemne con carro triunfal, Vítor y acompañamientos..." .


 A los sesenta y un años en Octubre de 1.745 fue nombrado Obispo de Málaga, recibiendo la consagración episcopal en Madrid el 27 de Mayo del año 1.745, e hizo su entrada en Málaga el 20 de Junio del mismo año.


Llegada de los toreros y de las manolas a la Plaza de San Juan, año 1910. Coche de Trifón Erro (VI-37)

SIGLO XIX

Tras la derrota de los franceses en la Batalla de Vitoria el 21 de Junio de 1813 que puso fin a la guerra, las tropas pasaron en retirada por nuestra Villa y sus campos en más de 50.000 hombres, con su figurado y ambulante rey José Napoleón Bonaparte saqueándola totalmente tanto en sus Iglesias, como casas y Ayuntamiento, el Archivo Municipal, etc.. dejando a la Villa en total ruina.

Durante unos años la Villa estuvo totalmente endeudada, siendo justo hacer notar, contaba Fortunato Grandes que aquí estuvo el General Alava, sirviendo de testigo ante el Diputado, refiriendo lo que Salvatierra había sufrido con aquel terrible azote final de los franceses, consiguiendo que fuera condonada la mitad de la deuda.

CONSTITUCIONALES

Tomaron los constitucionales con gran calor, contaba Fortunato Grandes, como si se tratara del hallazgo de alguno de los libros sagrados que se hubiera perdido, enaltecer la constitución e 1812, que dejó triste recuerdo del los años 1820 a 1823.

Es de ver el entusiasmo delirante de aquellos pocos vecinos, celebrando conciábulos, imprimiendo proclamas y sobre todo y sobre todo haciendo ostentación con el relieve de fiesta extraordinaria, en la colocación de la placa que pusieron en la Plaza de San Juan de "VIVA LA CONSTITUCION", como si ello fuera cima, compendio y panacea para este pueblo que sufría todavía las consecuencias que aquellos años horrendos de la francesada, tal y como hemos contado anteriormente.

Se quemó pólvora, hubo luminarias, SE CELEBRÓ CORRIDA DE NOVILLOS, repartieron vino a la guarnición y paisanos y se gritó con loco entusiasmo y exaltación patriotera por el triunfo liberal.

El 9 de Marzo de 1820 se juró la constitución y hubo otra vez dos días de fiesta y se repite el 24 de Agosto con UNA CORRIDA DE NOVILLOS.

La placa hecha por Don Gregorio Dombrasas se colocó el 30 de Mayo de 1820, fiesta de San Fernando, por la tarde hubo NOVILLADA y refresco para todo el pueblo, gastando en ello 2.621 reales.

LEVANTAMIENTO DEL CLERO

Pero antes hubo enfrentamientos muy duros en la Villa y se derramó sangre fraterna, como anuncio de la mucha que habría que verterse en las posteriores guerras civiles, en unas de las guerras más cruentas que se recuerden en la historia de nuestro pueblo.

En aquel periodo constitucional fue sorprendido el Ayuntamiento el día de Jueves Santo de 1821 y hechos presos por los que ellos llamaban facciosos o rebeldes guiados por algunos curas, acabando algunos de ellos ajusticiados en Vitoria con el garrote vil, como el cura de Zalduondo y el licenciado Gregorio Ruiz de Luzuriaga y el escribano Trifón Ortiz de Pinedo.

Hubo luchas sangrientas en Salvatierra, causando muchos muertos y heridos, que fueron recogidos en los arrabales y acequias y llevados al Hospital de Santa María.
 
A pesar de todos los trágicos acontecimientos que anteriormente relatábamos, el 4 de Octubre de 1823 se recibe la noticia de la libertad de Fernando VII y con ello el restablecimiento de los fueros y franquicias, con lo que el pueblo de nuevo sale a la calle a celebrarlo con repique de campanas, salva de pólvora, tamboril, iluminaciones y con la suelta nada más y nada menos que de 8 vaquillas.

TOROS, SOKAMUTURRA Y BECERRADAS

Público en la Plaza de toros de Salvatierra

SIGLO XIX

FESTEJOS TAURINOS EN LAS FERIAS

Los espectáculos taurinos constituían uno de los elementos festivos más importantes de la Feria junto con los partidos de pelota prácticamente desde la reinstauración de la misma.

Importancia de los festejos

Esta Feria era un gran mercado tanto de verduras y frutas como de semillas y todo tipo de ganados, etc..y a ella acudían las gentes para realizar sus transacciones económicas.

El Ayuntamiento, consciente de la importancia que para las arcas municipales tenían estas transacciones debido a los impuestos que cobraba, decidió atraer a más forasteros dando a la Feria un carácter festivo mediante actividades como CORRIDAS DE VACAS, PARTIDOS DE PELOTA, FUEGOS ARTIFICIALES, etc…

Año 1868

Según consta en las Actas del Archivo de Agurain se traían algunas veces los toros desde localidades próximas y también desde Estella, la Ribera Navarra o de Las Amescoas, por ejemplo en 1868 se trajo ganado para lidiar desde Los Arcos (Navarra) propiedad de Pedro Gurrucharri.

En una carta de 21 de Mayo de éste año al Ayuntamiento de nuestra Villa, Pedro de Gurrucharri advertía     "….que desde el momento que entrase en el término de Salvatierra mi ganado, éste quedaba a riesgo y cuenta de este municipio, e yo asegurado de cuanto ocurrir pudiera en él hasta tanto que volviese a salir el ganado de ésta jurisdicción"

Archivo Municipal de Agurain año 1868, Caja nº 379, Doc. Nº 28.

Llegada de las manolas a la Plaza de toros

En un acuerdo del 18 de Septiembre de 1870 se dice:

     "Se volvió a hablar de lo mucho que interesa dar animación a las ferias de esta Villa y hacer producir la sisa, que se tiene en administración y creyéndose que es el mejor medio el que además de las CORRIDAS DE VACAS haya un buen partido de pelota a blé, se acordó que el Sr. Alcalde vaya al instante a la ciudad de Vitoria y vea si Simón Landa, vecino de la misma, quiere encargarse de ejecución de un tendido formal y bueno, y que sirva para esta y otras ocasiones en lo sucesivo".

Y no sólo el Ayuntamiento de Salvatierra sino los propios habitantes de la Villa veían la necesidad de celebrar festejos para atraer ingresos. Ya en una instancia remitida al Ayuntamiento por Manuel Otaegui y consortes, vecinos de Salvatierra, se observa la preocupación de éstos ante las noticias que corrían por la Villa sobre la inexistencia de festejos en la programación de las Ferias del año 1888 a cargo de la Junta Municipal…

  "…que por lo que de público se dice son noticiosos que esa Corporación no ha acordado ningún festejo para las próximas Ferias que tan concurridas han sido en años anteriores por la distracción y entretenimiento que en ellas han encontrado cuantos han concurrido, y observan además que aún no se han fijado los anuncios correspondientes.

Extraña a los recurrentes  que no se comprenda por V.S. que la celebración de festejos en esta Villa ha redundado en años anteriores en pro de los intereses generales de la Villa, con el alza que se ha observado en los rendimientos de puertas y alhóndigas; por cuya razón no permitiendo  las circunstancias por las que pasa la Villa originar muchos gastos, es parecer de los recurrentes se supriman los fuegos artificiales, toda vez que es más atractiva la música y permanece durante los cuatro días de Ferias…se sirvan acordar contratar una pequeña charanga para los citados  días y que además de las VAQUILLAS que se corran el lunes y el miércoles; el jueves por lo menos se corran otras dos, y se autorice a los concurrente para matar un NOVILLO por los jóvenes de la localidad….


Archivo Municipal de Agurain. Caja nº 354. Doc. Nº 3



LAS FERIAS EN EL SIGLO XIX

Los festejos comenzaban con la Procesión del Santísimo Rosario el domingo por la tarde. El lunes y el miércoles, también por la tarde, solían celebrarse las CORRIDAS DE VACAS. El martes era el día destinado al concurso de ganado y por la noche se quemaban colecciones de fuegos artificiales. Los cuatro días de Feria se amenizaba con música de txistularis y tamborileros, gaiteros, charangas u orquestinas.

Todas las noches había bailables en alguna de las Plazas. También constituían un elemento muy importante dentro de estos festejos los partidos de pelota.

NOTICIAS DE FESTEJOS TAURINOS EN LA FERIA

La primera noticia referente a la celebración de festejos taurinos aparece en el programa festivo recogido en las actas de 23 de Septiembre de 1860:

   "Que las ferias se celebren este año los cuatro primeros días del mes de Octubre próximo en esta Villa, anunciándose por medio del Boletín Oficial que los días 1º y 3º se correrán vacas para aficionados, la noche del segundo día habrá fuegos artificiales y el cuarto día  un partido de desafío a pelota a blé por dos vizcaínos a tres riojanos y además en los cuatro días y noches  baile de tamboril, luminarias y otros festejos públicos".

  "23 de Septiembre de 1860".

Normalmente se celebraban dos corridas de vaquillas, el lunes y el miércoles de Feria. En ocasiones se llegaron a correr tres días vaquillas.

A partir del siglo XX lo habitual era que el último espectáculo taurino se llevara a cabo el jueves y no el miércoles. La hora de comienzo de este festejo oscilaba entre las tres y las cuatro de la tarde.

AÑO 1861

En este año las novilladas se celebraban en la Plaza de Santa María tal y como consta en los acuerdos del Ayuntamiento de este año y también se sabe que la feria duraba cuatro días siendo éstos los primeros de Octubre:

  "se acordó se fijen desde mañana anuncios en los cantones y sitios acostumbrados de ésta Villa, manifestándose que las ferias del actual año se celebrarán en ella los cuatro primeros días del próximo mes de octubre habiéndose dispuesto los festejos públicos siguientes: En los cuatro días tamboriles y bailes en las plazas hasta las diez de la noche encendiéndose las luminarias correspondientes desde dicha hora en adelante, baile con la música de aficionados de la Villa en la sala del Ayuntamiento, en la que sólo se admitirán personas que vistan traje decente. Los días uno y cuatro fuegos artificiales por las noches y el dos y tres novilladas por la tarde en la plaza de Santa María, con más cohetes de diversas clases y otros agregados."

Libro de Acuerdos de Agurain, 15 de Septiembre de 1861

AÑO 1864

En el siglo XIX en el intermedio de la lidia era habitual la colocación de una cucaña con gallinas para el entretenimiento del público.

 "Con el objeto de proporcionar más diversión al público en las próximas ferias de esta Villa, se acordó dar comisión al Procurador Síndico Don Fermín Uralde para colocar en la Plaza de Santa María el árbol de la cucaña, en cuya punta se pongan algún pañuelo o ave..

Archivo Municipal de Agurain, 30 de Septiembre de 1864

AÑO 1867

También se recogen noticias sobre la instalación de fuentes de vino bajo el palco de las autoridades.

  "Se dio al Sr. Alcalde para las corridas de vacas, en la Plaza de Santa María por las Ferias próximas el encargo de su cerradura y adorno y de la colocación de una fuente de vino debajo del palco o balcón del Ayuntamiento para mayor diversión y entretenimiento."

Archivo Municipal de Agurain a 29 de Septiembre de 1867

Plaza de toros portátil montada en el actual campo de fútbol

PLAZAS DE TOROS DE SALVATIERRA

El lugar de celebración solía ser la Plaza de Santa María aunque algunos años tal evento se celebró en la Plaza de San Juan. La plaza que se destinaba a la realización de este festejo se condicionaba de tal manera que cada año el Ayuntamiento nombraba a alguien de la Villa para que cerrara la plaza a cambio de una remuneración económica.

Este fue el caso de Ramón Larramendi, carpintero de la Villa y de Faustino Ruiz de Eguino que se encargaron del cierre de la plaza y colocación de una tribuna destinada a los miembros de la Junta Municipal en la década de los setenta del siglo XIX.

"Se convino con Ramón Larramendi de esta vecindad en abonarle 120 pesos por todo el trabajo de llevar, colocar, quitar y traer a su sitio los materiales para la cerradura  de la Plaza de toros de Santa María para las corridas de vacas por las Ferias próximas de esta Villa...."

Salvatierra a 29 de Octubre de 1869.


Plaza de toros de Agurain 1962, los mulilleros arrastrando el toro

  "Se convino con Faustino Ruiz de Eguino en darle y abonarle 140 pesos por poner y quitar la cerradura de la Plaza de Santa María y el tendido o balcón del Ayuntamiento para las corridas de vacas por las Ferias próximas…"

29 de Septiembre de 1872.


AFICIONADOS DE LA VILLA

 Como ya hemos mencionado con anterioridad, normalmente las vacas se solían correr por parte de los aficionados de la Villa. Pero en el año 1883 tenemos constancia de que los jóvenes de Agurain deseaban lidiar y dar muerte a uno o dos novillos para lo cual solicitaron al Consistorio una ayuda económica que les fue concedida "por una sola vez y sin que sirva de precedente":

   "Dada cuenta de la solicitud suscrita por varios jóvenes de esta Villa, pidiendo que se provea de un torete para lidiarlo y darle muerte en uno de los días de Ferias, así como también de dos caballos para el servicio de picadores y las capas para los exponentes, o sino se les asigne por tal servicio una cantidad asignada para sufragar los gastos que dicho espectáculo ocasione a los recurrentes, el Ayuntamiento acordó atendida la escasez de recursos con que cuenta el municipio se asigne a los solicitantes por una sola vez y sin que sirva de precedente la cantidad de 50 pesetas, debiendo proveerse los recurrentes de toro, caballos y capas, para lo cual, caso de aceptar este acuerdo, se pedirá el oportuno permiso al Sr. Gobernador.

Archivo de Agurain, 22 de Septiembre de 1883

AÑO 1883 - TOROS EN LA PLAZA DE SAN JUAN O EN LA DE SANTA MARIA?

Para poder celebrar las corridas de vacas era necesaria una autorización del Gobierno Civil de la provincia. Este permiso se concedía cuando se tomaban las "medias oportunas para la seguridad del público y la conservación del orden".

En el año 1883 se cerraron las dos plazas, la de Santa María y la de San Juan, para que un representante del Gobierno Civil reunía los requisitos necesarios.

Archivo Municipal de Agurain a 15 de Septiembre de 1883.
  
AÑO 1887

La lidia y muerte de novillos por parte de los jóvenes de la localidad sólo acontecía a finales del siglo XIX el último día de las Ferias y se llegaría a convertir en algo habitual hasta el año 1908.

Uno de los aficionados que mató a estoque una vaca fue Santos Ruiz, como aparece recogido en el Libro de Acuerdos de 1887. Y otro Bautista Lasa "El Pinto" también de Agurain.

    "Se encomendó al concejal Don Juan de Landa que formalizara la cuenta de gastos ocurridos con motivo del cierre de la plaza de San Juan para lidia de vacas en las Ferias últimas, gastos de dicha lidia y muerte de la vaca que se mató a estoque por el aficionado local Santos Ruiz y gallinas para la cucaña….

Libro de Acuerdos de Agurain a 10 de Octubre de 1887.


AÑO 1888

En el año 1888 el Consistorio realizó todas las gestiones necesarias a fin de conseguir la autorización para la lidia de vacas y muerte de un torere, pero dejó bien claro que los gastos debían correr a cargo de los solicitantes del espectáculo taurino, es decir, vecinos de la villa.

Por lo cual los solicitantes del espectáculo llevaron a cabo una suscripción popular con el objeto de cubrir estos gastos pero al no conseguirlo solicitaron de nuevamente de la Corporación una gratificación que de nuevo les fue denegada

Archivo Municipal de Agurain, Caja nº 354, Doc. Nº 3

AÑO 1900

En otras ocasiones eran los propios empleados municipales los encargados de cerrar la plaza destinada a la corrida de vacas y recibían una gratificación económica por dichos servicios extraordinarios. Así en 1900 Juan Simón Iturrospe, capataz de celadores, recibe una gratificación de 20m pesetas por dicho servicio.

La Plaza de toros no sólo se cerraba sino que también se acondicionaba colocando burladeros y echando arena en el pavimento. Existía ya preocupación para que el ganado que se lidiaba o corría sufriera lo menos posible.

En el año 1889 se recogía en actas una instancia de José Madariaga de Salvatierra "...suplicando que para que no se maltrate el ganado que ha de lidiarse en las próximas ferias, se arregle el suelo de la plaza que se encuentra en malísimo estado; el Ayuntamiento acuerda que como se pide se haga el arreglo solicitado, depositando en la plaza respectiva algunos carros de arena , comisionando al efecto para llevar a cabo dicho servicio al concejal Don Ruperto Munain.

Archivo Municipal de Salvatierra 24 de Septiembre de 1889

AÑO 1890

Se dio el caso en el año 1890 en que el Gobernador Civil llegó a desautorizar la corrida de vacas mientras no se pagara la deuda contraída con el maestro.

 "El Ayuntamiento quedó enterado…de otro oficio del Gobierno de la Provincia disponiendo que no se autoriza la corrida de novillos hasta que por este Municipio no se hayan satisfecho las atenciones de primera enseñanza…

Archivo Municipal de Agurain a 29 de Septiembre de 1890

AÑO 1891

Para las Ferias de este año el Ayuntamiento acuerda que se celebren dos CORRIDAS DE VACAS los días 4 y 8 de Octubre y que se contrate la charanga que dirige Don Antonio Piedrahita por 250 pesetas debiendo celebrarse la Procesión del Santo Rosario a las dos de la tarde siempre que en ello convengan las autoridades eclesiásticas.

Actas Municipales del 7 de Septiembre de 1891


Kepa RUIZ DE EGUINO

 
Regreso al contenido | Regreso al menu principal